Comenzamos la semana con una nueva obra de reforma en el Paseo de Almería. Casi 200 metros cuadrados a reformar completamente y cambiar la distribución original del inmueble, adaptado al uso del cliente.

La cocina pasa a ser un espacio diáfano integrado con el salón. Aún asi, un sistema de mamparas de vidrio que se ocultan en la pared permiten independizar el salón de la cocina.

Se prescinde de la pequeña terraza, y se integra en la zona de estar como un pequeño jardin interior, con un tratamiento natural del suelo.

Por último, la habitación de matrimonio se reubica en la última estancia de la casa, para ganar en privacidad. La zona de baño vestidor se mimetizan con el dormitorio, ganando en superficie y transversalidad de espacios.